Ud 9. Comentario de Texto "Mi lucha". El ascenso de los totalitarismos.

Análisis Comentario de Texto de la Ud 9.- El ascenso de los totalitarismos fascista y nazi.

Texto: Doc 24. Pg 236. “El Racismo y el antisemitismo”.

Si dividiéramos la raza humana en tres categorías: fundadores, conservadores y destructores de la cultura, solo la estirpe aria podría ser considerada como de la primera categoría (….) La mezcla de la sangre y el menoscabo del nivel racial que le es inherente constituyen la única y exclusiva razón del hundimiento de las antiguas civilizaciones.

El antípoda del ario es el judío. Es difícil que exista en el mundo nación alguna en la que el instinto de la propia conservación se halle tan desarrollado como el el “pueblo escogido”. La mejor prueba de ello lo constituye el hecho de que esta raza continúa existiendo. Si pasamos revista a todas las causas del desastre alemán (en la pasada guerra), advertiremos que la causa final y decisiva habrá de verse en el hecho de no haber comprendido el problema racial y, en especial, la amenaza judía.

Adolf Hitler, Mi lucha, 2º parte, 1925 – 1927.

1.- Naturaleza

1.1.- Por su forma.

• El presente fragmento pertenece a la obra “Mi lucha” (“Mein Kampf”) de A. Hitler. Se podría considerar un texto informativo, puesto que por su forma vendría a ser un manifiesto que condensa la idea sobre las razas que tenía el nazismo. El fragmento que aquí comentamos trata de la concepción hitleriana del Estado como vehículo para la promoción de la raza aria.

1.2.- Por su contenido.

• Es un texto de carácter político ya que se corresponde con un “manifiesto político” en relación a su concepción de las razas por el jefe del NSDAP.

1.3.- Por su origen.

• Es una fuente primaria, un documento de época, ya que es un fragmento original de la obra “Mein Kampf” o “Mi lucha”, dictada por Hitler a su lugarteniente en el partido nazi, Rudolf Hess. Este libro se comenzó a redactar en 1924 en la prisión de Landsberg, después de haber sido condenado a cinco años de cárcel tras el Putsch de Munich de 1923. El libro fue publicado en dos tomos, el primero aparecido en 1925 y el segundo en 1928.

2.- Autor, destinatario y momento histórico.

2.1.- Autor.

Adolf Hitler (1889 – 1945). Austriaco, hijo de un aduanero, ya huérfano vivió su juventud en Viena, en donde desarrolló su aversión hacia los judíos, los cuales “dirigían” la vida en la capital del Imperio Austro-Húngaro. Se alistó en el ejército alemán durante la IGM, en donde llegó a ser cabo (el escalón más bajo de los oficiales). En 1919 participó en la fundación del DAP (Partido de los Obreros Alemanes) que en 1921 transformó en el NSDAP (Partido Nacional Socialista de los

Obreros Alemanes). En 1923 participó en el Putsch de Munich, que le llevaría a la cárcel, en donde dictó esta obra. En 1933 alcanzó el poder en Alemania, fundando el III Reich, implantando un Estado Fascista. En 1939 provoca la II GM y en 1945, cuando ya dio la guerra por perdida se suicidó tomando una cápsula de cianuro.

2.2.- Destinatario.

• Al ser una obra publicada, su destinatario puede ser todo aquel interesado en la ideología fascista en su variante nazi, o en el racismo. Aunque, preferentemente, la obra se destinaba a los miembros y simpatizantes del partido nazi alemán, cuyo número llegó a ser el 10% de la población alemana. Al principio, cuando se publicó, sus lectores era un grupo minoritario, pero a partir de 1929 con la llegada de la crisis, el número de lectores se acrecentó hasta convertirse en un “best seller” en Alemania. Una vez en el poder Hitler, el libro se regalaba a todas las parejas que se casaban, así como a todos los estudiantes que se graduaban. Ni que decir tiene que Hitler se hizo rico con los derechos de autor.

2.3.- Momento Histórico.

En este apartado deberíamos relatar los acontecimientos más importantes de cuando Hitler dictaba los contenidos de esta obra, es decir, sobre mediados de los años veinte. Por ello debemos referir que en los primeros años de su existencia, la República de Weimar vivió una situación de grave inestabilidad, especialmente en los años 1922 y 1923. En 1923, en medio de la hiperinflación y de la exaltación nacionalista provocada por la ocuparación del Ruhr por tropas franco-belgas, grupos ultranacionalistas de derechas, entre los que estaba Hitler y su pequeño partido, el NSDAP, prepararon un golpe de Estado conocido como “putsch de Munich”, que fracasó estrepitosamente. Hitler fue encarcelado por ser el jefe de uno de los partidos organizadores.

En 1925, tras su salida de prisión, Hitler refundó el partido y replanteó su programa con el fin de ampliar sus apoyos sociales: limitó sus postulados anticapitalistas a la lucha contra los financieros judíos, utilizó eficazmente la profunda corriente antisemita y anticomunista existente en Alemania y la gran impopularidad del Tratado de Versalles. En definitiva, cambió de estrategia para transformar su partido en un movimiento de masas. Y de masas será cuando llegue la crisis de 1929 a Alemania y este país se contagie de la misma intensamente, por la repatriación de los capitales americanos sobre todo.

III.- Análisis Interno.

III.1.- Idea principal: Se puede expresar que la idea principal sería la concepción hitleriana sobre las razas humanas, en especial, de la supuesta superioridad de la raza aria y de la maldad de la judía.

III.2.- Ideas Secundarias: Podemos distinguir cuatro ideas secundarias que vendrían a ser las siguientes:

a.- Existen 3 razas: la aria es la única de las “fundadoras de cultura”, es decir, la superior.

b.- La mezcla de las razas es la causa del hundimiento de las civilizaciones.

c.- La raza opuesta a la aria es la judía (encarna todos los males).

d.- Alemania ha perdido la IGM por el problema racial, por la amenaza judía.

IV.- Análisis externo o explicación.

- La tendencia antisemita presente en Alemania desde antes de 1919, se amplificó con la llegada de los nazis al poder, los cuales se basaban en lo expuesto en la obra “Mein Kampf”. Este antisemitismo fue uno de los objetivos prioritarios del Estado nazi para asegurar la cohesión social, sustituyendo la división en clases sociales por la unidad y la supremacía racial aria. Para ello consideraban necesario suprimir todas las “impurezas” que no se ajustaban al estereotipo ario, ya fuese por su origen étnico, por incapacidad física o mental o por alguna anomalía social (Por ejemplo: Programa de Eutanasia).
- Sin embargo, el grupo de víctimas más amplio fue la comunidad judía. Las medidas nazis contra los judíos atravesaron por tres fases:

a.- Entre 1933 – 1938 se impulsó una legislación que eliminó los derechos políticos y sociales de los judíos, además de expoliarle los bienes. En 1935 se aprobaron las leyes de Nuremberg, que excluyeron a los judíos de la ciudadanía alemana y prohibían los matrimonios mixtos.
b.- Desde 1938 el antisemitismo se hace más violento: vía libre a su persecución. Noviembre del 38: “Noche de los cristales rotos”: tiendas y sinagogas judías fueron saqueadas por las S.A y las S.S. Inmediatamente después, miles de judíos alemanes y austriacos empiezan a ser detenidos y encerrados en campos de concentración.
c.- El punto culminante se alcanza en 1942 con la llamada “solución final”, es decir, el programa de eliminación total de la población judía de Europa, a través de los campos de concentración. Cinco millones de judíos fueron asesinados.

V.- Síntesis.

• Aunque todos los fascismos tenían como uno de rasgos comunes el racismo, es sin duda en el nazismo, en donde este y el antisemitismo se convirtieron en la doctrina central del movimiento, como elemento aglutinante de la unidad nacional, basada en la supuesta superioridad de la raza aria, que además se autoconcedía el derecho a explotar a las “razas inferiores”.

A lo largo del siglo XX las repercusiones del antisemitismo y nazismo tuvieron su pervivencia hasta terminada la IIGM (1945), una vez acabada la más cruel de todas las guerras que ha conocido la humanidad, esos dos movimientos han quedado como residuales. Aunque en algunos países padecieron regímenes homologables al fascismo (España sin ir más lejos con el Franquismo). En cambio, el racismo sí ha continuado durante buena parte del siglo XX, con mayor o menor intensidad, (desde el apartheid sudafricano hasta la discriminación por razones de raza actual).